Cubatas de semen

He estado bastante ocupada durante los últimos días y por eso no he podido escribir nada, pero bueno, ya estoy de nuevo por aquí. Ahora mismo son... las 6 de la mañana, y acabo de llegar a casita muy bien follada. Salí con un amigo a cenar y luego hemos ido a su casa a follar como locos. Se ha portado como un campeón, casi siento todavía los embistes de su polla en mi culo.

Pero hoy quería hablar de algo que suelo hacer de vez en cuando y que descubrí tras ver una película. Veréis, una noche estaba viendo una película porno en la que el chico, tras follarse a la chica, se corría sobre una taza de café. Acto seguido, la chica se lo bebía. Era la primera vez que veía algo así, me pareció divertido y a la vez muy guarro y morboso. Me excitó imaginar que yo hacía lo mismo.

Al día siguiente, quedé con uno de mis amantes y le propuse hacer lo mismo. No podía quitarme de la cabeza lo que había visto en el vídeo. Le dije que preparara un café, pero que no le echara leche todavía, que ya se la echaría más tarde directamente de su polla :-) Y así lo hizo. Y yo me bebí todo el contenido mientras no paraba de masturbarme.

Tragar el semen de aquella forma tan "original" me pareció algo muy guarro, de ahí que me excitara tanto. Me gustó. Sin embargo, ya que el café es algo que no siempre apetece, se me ocurrió para las próximas ocasiones sustituir café por un buen cubata, que entra mucho mejor.

También se me ocurrió que sería morboso darle sorbos mientras mi compañero sexual me follaba, así que, en ocasiones, lo que hago es decirle que antes de follar se haga una paja y se corra en el vaso, y así, cuando yo llego, ya me lo tiene preparado, y puedo saborearlo sin tener que esperar a que él se corra tras follarme. Cuando se corre, vuelve a depositar su leche sobre el cubata y así me sabe mejor, me gustan los cubatas bien cargados :-)

Ser follada mientras doy de vez en cuando sorbos al cubata de semen me pone muy cachonda. Me excita mucho. Además, el sabor del semen siempre me ha gustado.

Como decía, es algo que me excita por lo morboso y guarro que resulta. Soy muy viciosa y morbosa, ya os iréis dando cuenta poco a poco con las cosas que contaré.

Besos.

Follando con Roberto

Hace tres meses conocí a Roberto en una cafetería. Me pidió un cigarro y empezamos a conversar, situación que no sería posible hoy en día por culpa de la maldita ley anti-tabaco.

A los 15 minutos estábamos en su coche, que estaba estacionado en un parking subterraneo, follando como dos desesperados.

Roberto tiene 47 años y es un hombre obeso. Está muy gordo, pero curiosamente se muestra bastante ágil cuando estamos follando. Me encanta follar con él porque tiene mucho aguante y porque sus corridas son bastante abundantes. Me excita mucho ver una polla soltando leche en cantidad.

Desde que nos conocimos, hemos quedado 14 o 15 veces y nunca me defrauda.

Hoy me apetecía mucho verlo y hemos quedado en la cafetería de un centro comercial, pero por desgracia, a los pocos minutos, ha recibido una llamada de su jefe. Tenía que incorporarse con urgencia al trabajo por un asunto importante, así que no nos ha quedado más remedio que echar un polvo rápido en su coche. Un polvo breve pero muy, muy intenso. Tan intenso que, debido a mis gritos de placer, una señora asomó la cara en el cristal, asustada, pensando que estaba pasando algo malo allí.

Menos mal que era una señora mayor y no un chaval joven, porque no sería de extrañar que hubiera sacado el móvil y nos hubiera hecho una foto para enseñarla a los amigos o publicarla en la red.

Esperemos que la próxima vez que me reuna con Roberto, podamos echar un polvo con más tiempo y más comodidad, en la cómoda cama de un hotel como solemos hacer casi siempre que nos vemos.